Dentro de los objetivos de muchos pacientes no solo es un control al peso total, si no crear un cambio de composición corporal con un descenso a porcentajes en grasa y aumento a masa muscular. Podemos tener a dos pacientes con el mismo peso, pero totalmente una composición corporal distinta, ya que un kilo de grasa y un kilo de músculo, es un kilo, sin embargo la densidad y el espacio que ocupa uno y el otro son distintos. Es bueno amar a nuestro cuerpo pero también es bueno querer seguir trabajando en él.
El IMC es una ecuación que nos ayuda a calcular la relación del peso y talla de la persona. Este puede tener un margen de normopeso muy amplio, sin embargo cada quien tiene sus puntos estéticos de referencia en específicos por lo cual se puede trabajar a una mayor definición sin afectar el desarrollo muscular.